
Se han detenido a 7 personas, implicados en la custodia, preparación, botadura y pilotaje de embarcaciones de alta velocidad, de las empleadas para el transporte de hachís.
Entre los lugares registrados se encuentran dos naves industriales, una que se había empleado para ocultar una narcolancha, y la segunda que se utilizaba como taller clandestino para prepararla para la navegación.
La Guardia Civil de Tarragona, en el marco de la denominada “Operación RENAVIS”, desplegó el pasado día 22 de octubre un complejo dispositivo policial de alcance provincial, con el objetivo de desarticular una organización criminal dedicada a la gestión y apoyo logístico de narcolanchas, que culminó con la detención e investigación de siete personas acusadas de delitos de pertenencia a organización criminal, tráfico de drogas, contrabando, blanqueo de capitales y defraudación de fluido eléctrico.
La investigación se inició en el mes de agosto de 2024, cuando los agentes tuvieron conocimiento de la ubicación de una nave industrial en la localidad de Reus, en la cual se podía estar custodiando una narcolancha. Por tales motivos se iniciaron intensas vigilancias sobre el lugar, observando como acudían a la nave diversas personas ya conocidas por los investigadores por su vinculación a operaciones policiales anteriormente desarrolladas por los mismos hechos.
Durante varias semanas, los investigadores vigilaron de forma intensiva la citada nave hasta que, a finales del mes de septiembre, pudieron detectar como trasladaban la narcolancha a otra nave industrial, en esta ocasión ubicada en el polígono industrial de Santa Bárbara. Fue en este lugar donde comprobaron que la organización criminal había instalado un taller de preparación mecánica de narcolanchas, observando como nuevos integrantes de la organización criminal acudían de forma continua y realizaban extensas jornadas de trabajo, para realizar la preparación mecánica de la embarcación y ponerla en disposición de poder navegar.
Una vez introducida en el agua durante el mes de enero de 2025, la narcolancha navegó hasta la zona sur de la península, dirigiéndose a la zona cercana al mar de Alborán. A pesar de encontrarse ya navegando, la organización continuó prestando servicio logístico a la narcolancha, desplazándose hasta la provincia de Almería en diversas ocasiones para poder dar dicho apoyo. De esta forma, los investigados facilitaban víveres a sus tripulantes, ayudaban a realizar cambios de tripulación, etc.
Se daba la circunstancia que, dos de los pilotos habituales de la narcolancha, residían en la provincia de Tarragona y pertenecían a la organización criminal investigada, pudiendo de esta forma los investigadores monitorizar su actividad, comprobando como embarcaban en la narcolancha durante periodos superiores a un mes. Mientras no desarrollaban esta actividad la organización criminal se autofinanciaba con el tráfico de drogas, en tanto que otros de los miembros de la organización se dedicaban al cultivo de marihuana; habiendo establecido varias plantaciones en el territorio, cuya producción acumulaban en grandes cantidades, presuntamente para su posterior traslado a otros países europeos.
Una vez obtenida toda la información posible sobre el funcionamiento de la organización, se procedió durante la mañana del día 22 de octubre a la explotación de la operación policial, realizando entradas y registros en las localidades de Reus (3), Cambrils (2), La Selva del Camp (1), Vilaseca (1) y Santa Bárbara (1). En el dispositivo participaron más de 120 agentes de diversas unidades de la Guardia Civil dependientes de la Comandancia de Tarragona, Comandancia de Barcelona, Unidad Especial de Intervención (UEI), Agrupación de Reserva y Seguridad (ARS) de Barcelona y Servicio Cinológico.
Durante estos registros se intervinieron 27,2 kg. de cogollos de marihuana dispuestos para su distribución, 288 gr. de hachís, 1.015 plantas de marihuana, 2 escopetas de aire comprimido, un machete, 34.905 euros en efectivo, 7.040 dirhams marroquíes, multitud de elementos relacionados con la navegación (teléfonos satelitales, visores nocturnos, etc.), material relacionado con la preparación de EAV,s (un motor de alta potencia, colas, hélices, etc.), material para el cultivo de marihuana y otros efectos de interés para la investigación.
Como resultado de la operación, se procedió a la detención de siete personas con edades comprendidas entre los 30 y 50 años de edad. Cuatro de los detenidos fueron puestos a disposición del Juzgado núm. 2 de Reus, quien decretó la libertad con medidas cautelares para los mismos.


